Por: Raúl Alvarez-Russi
El 20 de agosto de 1836, el general Andrés Santa Cruz, Presidente de la Confederación Perú-Boliviana, decretó la creación como la Provincia Litoral del Perú, declarando la autonomía política ya que desde el virreinato hasta 1836 fue dependencia portuaria de Lima, la ciudad capital, elevando así la categoría de antigua ciudad del Callao, que no tuvo fundación española, por eso se conmemora 145 años de ese título. Pero la brillante historia del puerto más importante del Perú y del Pacífico está plagado de acciones de heroísmo defensora de las leyes y las libertades.
En 1995 se acordó incorporar al escudo de la ciudad, creado por el Libertador Simón Bolívar el 1ro de febrero de 1826, en su diseño la representación el título de «La Fiel y Generosa ciudad del Callao, Asilo de las Leyes y la Libertad» otorgado en 1834 por la fidelidad y heroísmo con que el pueblo defendió la causa de la Independencia Nacional.
Otro blasón concedido en 1857 por el gobierno del Libertador Ramón Castilla, el título de «Provincia Constitucional» -único en el Perú- por su defensa a la constitución en contra del levantamiento del General Vivanco. La gran gesta patriótica en defensa de la libertad y la independencia del viril pueblo chalaco, siguió brillando a lo largo del siglo XIX, con la participación heroica en el Combate del Dos de Mayo de 1866, con el cual se terminó todo intento de reconquista por España sus dominios en América y al hacer frente al bloqueo de la armada chilena durante la Guerra del Pacífico.
Con este historial lleno de gloria se forjaron los personajes que luego dieron lustre a su ciudad entre los que podemos contar a Antonio Miró Quesada, director del diario «El Comercio» en 1905, catedrático y político; Alberto Sabogal, médico cirujano; Alejandro Granda, cantante lírico; Carlos Concha Cárdenas, ensayista y parlamentario; Néstor Gambetta, político, militar, poeta e historiador; Patricio Sabogal, reconocido e ilustre pedagogo y en la música popular la lista es larga entre los importantes autores y compositores Manuel Raygada, «Mi Perú» y «Nostalgia Chalaca»; Eduardo Márquez Talledo, «Nube Gris» y «Callao»; Felipe Coronel Rueda «Estrellita de Sur», Anna Renner «Olvídate de mi amor», Pancho Quiroz «Caricia» son sus obras más importantes; Oscar Avilés «La primera Guitarra del Perú»; Ima Sumac; Rosa Gutiérrez «Fetiche»; Delia Vallejos; César Altamirano; Betty Missiego entre otros.
Sede de la gloriosa Marina de Guerra del Perú en su jurisdicción se encuentran servicios de descarga de combustible, intervención de helicópteros y hombres rana, de salvataje -investigación científica- orientación de navegantes y museo histórico naval. La Escuela Naval que se encuentra en el distrito balneario de La Punta, es donde se forjan los futuros oficiales aprendiendo teoría y práctica de navegación durante cinco años de estudios, divididos en tres secciones, se preparan física y profesionalmente.
En el deporte del fútbol el Sport Boys ha sido uno de los equipos que más se han destacado con futbolistas de todas las épocas como Telmo Carbajo, Teodoro Alcalde. En la década del 30 del siglo pasado y siendo nuestro fútbol amateur, se llegó a una etapa única en la historia de este deporte, todo el equipo completo nos representó en las olimpiadas de Berlín de 1936, fue una participación muy importante por lo destacado de sus triunfos, siguieron los ídolos en diferentes épocas: Titina Castillo, Willy Barbadillo, los Hermanos Valdivieso, Marcos Calderón, José Muñante, Cachito Ramírez, Gerónimo Barbadillo.
Otro de los símbolos de la historia peruana y principal atractivo turístico del Callao es la Fortaleza del Real Felipe, termina su construcción en 1774 y sirvió para defender a los ataques de corsarios y piratas, tiene forma de pentágono con 5 baluartes. Con la rehabilitación del centro antiguo histórico y las playas del distrito balneario de la Punta, lo convierten en un verdadero atractivo turístico.
Con los otros distritos de Bellavista, La Perla, Carmen de la Legua y Ventanilla están ubicados en la Bahía más extensa de la costa occidental de América del Sur con sus 74 Km² de los cuales 57 Km² de área continental y 17 Km² de Islas y distantes de Lima capital a 14 Km de distancia con 5 principales avenidas que la conectan y el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez en sus territorios y el Terminal Marítimo.
Conservando sus rasgos característicos e históricos que la diferencian de Lima, a pesar de su cercanía, vamos a dar un ¡Chim Pum, Callao! grito con que el famoso batallón de calificados defensores de la patria «Guardia Chalaca» que estaba conformado por la juventud del Callao, ofrendaban sus vidas en la defensa de San Juan de Miraflores en la Guerra del Pacífico y que hoy queda como grito de regocijo en justas deportivas, cívicas y artísticas…¡CHIM PUM CALLAO!.
Como un homenaje a esta fecha les brindamos la letra completa del vals peruano «Callao» del maestro Eduardo Márquez Talledo que injustamente ha sido cercenada por los intérpretes que la cantan y la han grabado, al no cantarse la segunda parte donde se menciona al Callao, puede estar dedicada a cualquier otra ciudad que esté a orillas del mar. La segunda parte se canta con la misma melodía de la primera parte.
CALLAO (vals peruano)
de Eduardo Márquez Talledo
Pedazo querido de tierra peruana
donde una mañana vi la luz del sol;
pulso mi guitarra y entre sus sonidos
se ven los latidos de mi corazón.
Cada pincelada de tu puro cielo
me brinda un consuelo, me da una ilusión.
He vuelto a tu vida, tranquila y serena,
y de cada pena hago una canción.
Bandadas de gaviotas
me traen de lo ignorado,
recuerdos del pasado,
ternuras e inquietud;
y entre la blanca espuma
que acaricia tu orilla,
surge mi madre y brilla
entre un halo de luz.
Tus calles retorcidas,
tus casas caprichosas
tu mar, mágico espejo
de esmeralda y de sol
Yo quiero confesarte
con emoción sentida
que en ti encontré la vida
y en ti encontré el amor.
Callao, puerto mío
tu nombre en la historia
es cumbre de gloria y de tradición
por eso al brindarte, mi canción sentida
va en ella mi vida y mi admiración.
Callao pueblo digno recibe el presente
que mi alma latente, te da en su cantar;
viril puerto mío, deja que orgulloso
tu «chimpun» glorioso, grite una vez más.