PABLO CASAS PADILLA

El 13 de marzo de 1912, en los Barrios Altos de Lima nació Pablo Casas Padilla. Autor de los valses: Desengaño, Optimismo, Juanita, Anita, Humillado, Tiempos pasados, Digna. Olga, Mal proceder, Dos contra el mundo, Teresita y otros más.
 
Pablo Casas era sobrino de otro gran compositor barrioaltino, Nicanor Casas, por lo que la música criolla era una especie de herencia familiar para este gran compositor. Su vals «Anita» fue el que lo hizo célebre en el mundo de la canción criolla. En una entrevista que se le hiciera dijo que él componía valses porque satisfacían una necesidad de liberar tensiones internas y era sincera expresión de creencias personales.
 
Al igual que muchos de los criollos de antaño, Pablo Casas terminó sus días con una irrisoria pensión del Estado. Falleció en 1977, pero su vals «Anita» lo siguen interpretando los mejores exponentes de nuestro criollismo actual.Se trata de el mas humilde, sencillo y humano. Sin presagiar que seria un genio de nuestra música criolla este legendario personaje nació un día 13 de Marzo de 1912 en nuestra tres veces coronada Lima, se puede decir sin equivocarme, que nació nuestra música criolla por dentro, ya que desde muy pequeño fue un destacado rondista mucho antes de aprender a tocar la guitarra tan magistralmente como lo hacia en su querido barrio Santa Catalina, en la calle La Confianza, desde muy joven se codeo con los mas grandes compositores de la época tales como: Laureano Martínez, Samuel Joya, Guillermo De Acosta, Felipe Pinglo, que ademas de ser su gran amigofue su gran consejero, Carlos A. Sacco, Pedro Bocanegra, Eduardo Marquez Talledo, Víctor Correa Marquez, Manuel Cobarrubias y muchos mas que escapan a la memoria. Con ellos departió grandes noches de jaranas que duraban hasta 15 días sin parar, ya que por esos años todo era amistad sana y se competía dentro del marco de la amistad. Ustedes se preguntaran quien es ese hombre tan misterioso, del que vamos a ocuparnos. Se trata del Maestro: Pablo Casas Padilla, el sucesor del Maestro Pinglo. Este gran genio de la composición destaco en el ambiente artístico e inquietud por lo mas pobres y necesitados.

Enviado por Dario Mejia

Buena Dario…por recordar otro grande de la composicion peruana y «Anita» el vals estandarte de su producción, que como siempre no es muy difundida, Pablo Padilla Casas quien tiene entre sus laureles que el Maestro de los Autores y compositores del Peru Felipe Pinglo Alva lo nombrara en su unica entrevista de la Revista «Cascabel» a pocos meses de su fallecimiento, donde se expresa muy bien de el y sin mencionar que es su sucesor lo destaca entre los muchos jovenes de esa epoca que componian musica criolla, 24 años tenia Pablo Casas cuando muere el maestro (1936) y continua con el pendon que el le lego y ahora a nosostros nos toca seguir difundiendolo ente otros grandes de nuestra musica.

TIEMPOS PASADOS (vals peruano)

En un tiempo fuiste dueña de mi mente

no lo niego, porque asi esto sucedio

si te quise, no lo dudo.

Porque asi hago memoria de un pasado tan oscuro

que ni el sol lo alumbrara.

Me brindaste un cariño verdadero

yo agobiado por amores no crei

culpa mia no fue entonces que jugara y me riera

porque en otros tiempos otras se jugaron con mi maor.

El tiempo ya ha pasado y todo lo he olvidado

tu no me olvidas; no puedo continuar

con este amor tan bueno que mal he pagado

no pidas imposibles ni cruces mi camino

que tengo otro cariño que es mi felicidad.

Hoy conmemoramos un aniversario de su nacimiento, hubiera cumplido 91 años y en la lista tenemos a nuestro buen amigo Walter Huambachano quien lo conocio en vida por intermedio de su padre Luciano Huambachano que nos podria contar sus vivencias con este Señor de Señores de nuestra cancion.

El maestro Pablo Casas desde pequeño sintio inclinacion por la musica criolla que escuchaba en las jaranas antiguas de encerronas que duraban dias bajo llave, asi cuentan que se nutrio de los criollos de la epoca a los 15 años ya tocaba vihuela que le llego como regalo y su abuela al ver la facilidad que tenia para tocarla le regalo su primera guitarra.

Un amigo mayor que el llamado Ricardo Martinez que tocaba vihuela de 12 cuerdas le comenzo a enseñar, aprendio tan rapido que ya iban como duo a las jaranas detacandose el siendo tan joven, en una de esas fiestas tuvo una decepcion amorosa, contaba con 17 años, componiendo los valses «Olga», «Mal Proceder» y «Tiempos Pasados» corria 1929. Su primera presentacion la realizo en Radio Nacional en 1932 con un conjunto que lo intergraban Manuel Villalba y Cesar Santa Cruz Gamarra.

El encuentro con el maestro de maestros Felipe Pinglo Alva se produjo en la casa de Jose Moreno que quedaba en la Ave. Abancay en un ensayo con el conjunto Abancay que estaba integrado por Jose Moreno, Enrique Salinas, Cesar Santa Cruz y Nestor Rosas, Pinglo quedo gratamente impresionado por el joven Casas de quien habia escuchado los valses «Olga» y «Mal Proceder» y en esa noche dieron inicio a un amistad que se trunco con la muerte del «Poeta de los Pobres». Su vals cumbre «Anita» lo compone en 1936 iniciando su consagracion difinitiva como compositor siendo muy buen interprete y guitarrista.

Pablo Casas Padilla muere en la ciudad de Lima en el mes de enero de 1977 a los 65 años y en la actualidad su produccion musical no es conocida como se lo merece…Un Grande de la Musica Criolla Peruana!

Escrito por Raúl Alvarez-Russi

 

Estimados Raúl y Darío, primeramente un bravo para ti Darío por las reminiscencias de Pablito Casas, y muy de acuerdo contigo Raúl, pues Pablito fue une tipazo, un señor de señores, como lo eran sus camaradas de juergas; un caballero, respetuoso y de una discreción indescriptible.
Sí, tuve el gran privilegio de haberlo conocido, en cada reunión de la casa era infalible, pues lo unía una gran amistad con mi padre.
Raúl si no me equivoco, el Bardo Inmortal, Felipe Pinglo, en su lecho de dolor en presencia de algunos compositores y criollos, presente tambien su inseparable amigo y compadre Pedro Espinel, Felipe Pinglo se expresó de la forma como haz relatado, solo que él, personalmente delante de ésta pléyade nombró directamente como su sucesor a Pablito Casas, éste relato lo tengo no solamente de mi padre sino tambien de otras personas; estuvo presente el gran Manuel Garrido, guitarrista compositor y criollo bohemio, autor de «Delia» que originalmente le pusiera «Teotis», y otros temas mas, que a la sazón había formado la Estudiantina «Royal» integrada por Felipe Pinglo José «Paquete» Moreno y él mismo.
Decía pues que  Manuel Garrido, conocido tambien como «El Rey del Palo» (yo sé porqué) fue quien me contó este relato en una jarana en casa y don José Moreno, compadre de mi padre, asintió con la cabeza, diciendo :asi fue.
Cabe mencionar tambien que Pablito (se le decía asi de cariño) que él ya dominaba la vihuela de doce cuerdas a la temprana edad de 15 años, dirijido por el profesor y amigo (aunque mayor que él) don Ricardo Martinez con quien luego haciendo pareja, dúo exepcional, irrumpían ee jaranas imponiendo su estilo sin igual.
Sus composiciones como Olga,  Mal Proceder, Tiempos Pasados, fueron el fruto de un terrible desengaño, de un «amor trunco» que en rindió su evidencia en una de esas jaranas, Pablito aun contaba con 17 abriles, bueno marzos que es su mes de nacimiento.
En 1932 formó parte de un  cuarteto en voz y guitarra con Manuel Villalba y  César Santa Cruz Gamarra; posteriormente formó el grupo «Abancay» con José Moreno, Enrique Salinas,  César Santa Cruz y  Néstor Rosas; este conjunto se llamó asi pues los ensayos se realizaban en casa de «Paquete Moreno» quien vivía en la avenida Abancay.
Estando este grupo en ensayos, llegó un visitante sorpresa : Felipe Pinglo Alva, quien al escucharlos los felicitó muy efusivamente, en especial a Pablito Casas haciéndole saber que él conocía sus obras, y para sorpresa, se puso a cantar Olga y Mal Proceder.
Loas a atan insgine maestro «Señor Compositor».
Otro lindo vals que pusieran de moda los Chamas : 
Paula Rosa

Escrito por Walter Huambachano I.

Eloisa Angulo

 

Eloisa Angulo
Eloisa Angulo

LA SOBERANA DE LA CANCION

Eloísa, la misma traviesa muchacha que se escapaba del colegio para ir a concursar con su prima a la radio y que con el correr del tiempo se convertiría en gran figura de la canción criolla, nos ha dejado y en fecha tan señalada.

Una vez, durante una entrevista y viendo la modestia de su hogar en un edificio de La Victoria, le preguntó que se siente ser una de las seis grandes de la canción?…

‘La nostalgia de saber que fueron tantos años de lucha y sólo he conseguido un nombre’, fue su respuesta.

Sin embargo, y pese al infortunio que significa el no tener salud y mantenerse lejos de los aplausos, Eloísa mantenía su espíritu de lucha y sus deseos de ser amada, como cuando el gran cañonero Lolo Fernández la inspiraba a entonar con más bríos los versos de ‘Idolatría’.

Versos que en momentos como éstos tienen mayor significación, porque al compás del vals su voz decía:
‘Los suspiros de mi pecho, ya no están a tu lado/ en vano es que los conserves, cuando no los has de amar….’
Su recuerdo, su voz y su arte siempre estarán a nuestro lado.

Eloísa Angulo con su titulo de Soberana de la Canción, por ser la única que sabía interpretar con calidez, propiedad y sentimiento y bella voz, los versos de ‘El Payande’ y ‘Ocarinas’ de Manuel Covarrubias.

‘Son tus risas cristalinas/ cual un coro de ocarinas…’

Pero lo mejor del repertorio de Eloísa Angulo, los valses que más aplausos arrancan y el público pide una y otra vez, son «Las Madreselvas», «Celaje» y «Hortensia», siendo considerada como la mejor intérprete de la música de Felipe Pinglo Alva.

‘Escucha amada mía la voz de los cantares que brotan de mi vida cual desolado son…’

NICOMEDES SANTA CRUZ GAMARRA

1925

– 4 de Junio. Rafael Nicomedes Santa Cruz Gamarra ( muy pocos conocen la existencia de este primer nombre y salvo en sus primeros años, y sólo en documentación, nunca fue utilizado porNicomedes) nace en Lima, Perú, en la calle Sebastián Barranca nº 435, del distrito de Nuestra Señora de las Victorias (popularmente conocido como La Victoria). Es el noveno de diez hermanos. Suspadres son el dramaturgo don Nicomedes Santa Cruz Aparicio (1871) y doña Victoria Gamarra Ramírez (1886).

– Parte de sus primeros estudios los cursa en la Escuela Fiscal “Sebastián Barranca”. Más adelante su familia cambia de domicilio pues su padre es nombrado jefe de mecánicos en la HaciendaLobatón. Lo matriculan en la Escuela Fiscal de José Gálvez.

 1945

– Conoce a don Porfirio Vásquez (1902), decimista y folklorista. Gracias a este encuentro retoma la tradición oída a su madre. En estos años pasados había compuesto silvas, sonetos, versos formalesque no le llenaban.

 

1953

– 16  de  Diciembre.  Monta  su  propio  taller  de herrería   al   lado   de   su   casa:   HERRERIA  Y CERRAJERÍA “SANTA CRUZ”, en el Jirón Pastaza nº 651 de Chacra Colorada, Breña

 

1957 (Actuaciones)

– 11 de Mayo. Debuta en el Teatro Municipal de Lima integrando  la revista negroide “Estampas de Pancho Fierro”.

– 15 de Junio. Formando  parte  de  la  misma  Compañía  hace  su  debut radial en Radio Corporación de Santiago de Chile.

– Se incorpora al conjunto  “Fiesta Criolla”.

– 10 de Julio. Muere su padre.

– Octubre. Sale el disco “Gente Morena”, editado por  Odeón.  En la cara A aparecen glosas y décimas de Nicomedes; por  la cara B,  participa  junto  a  otros  artistas en «Serenata Criolla» y «Números Musicales».

 

1958 (Actuaciones)

– Abandona el conjunto “Fiesta Criolla”.  Comienza  colaboración  con  el  guitarrista Carlos Hayre.

– 1 de Junio.  Publica  su  primer trabajo periodístico, “Ensayo sobre la Marinera” en el Suplemento Dominical del diario «El Comercio».

– 26 de Julio.  Participa en  el  primer  programa  comercial  de la televisión peruana en el «Canal 7».

– Es invitado por los estudiantes  de la Universidad de San Marcos para que dé unas charlas sobre la “Décima en Hispanoamérica”.

– A mediados de año forma el conjunto “Cumanana”.

– Como herrero que es, forja y posteriormente dona, el enrrejado  que formará parte del mausoleo  del  compositor  peruano  Felipe Pinglo. En el  proyecto  cuenta con la colaboración   de  sus hermanos  Pedro (amigo  de  Felipe  Pinglo)  y  César,  su sobrino Octavio  y  del  artesano  Miguel Arista del Aguila.

– 10   de   Diciembre.   Presentación  del conjunto    “Cumanana”    en   el   teatro limeño Perricholi.

 1992

– A la edad de 67 años, después de algunos años de padecer un cáncer de pulmón, y tras una intervención quirúrgica en el Hospital Clínico de Madrid, deja de existir el 5 de Febrero. Sus cenizasfueron esparcidas por su familia en la sierra de Madrid (España).

 

 

Decima Guitarra llama a cajon

Guitarra llama a cajón,

Cajón a la voz primera.

Escuchen con atención,

¡aquí está la Marinera…!

 

 

La Marinera de Lima

tiene influencia afro-hispana,

la “primera de jarana”

en copla o cuarteta rima.

Inicia el toque la prima

pero es más lindo un bordón.

Aún no entra la canción

porquecomo requisito,

antes que el cantor dé un grito

guitarra llama a cajón.

 

Los que escuchan hacen palmas

y se cuadran las parejas,

por lo general son viejas

-mejor aún si son zambas-.

Tan sólo mueven las gamas

y un poquito la cadera.

Todo esto mientras se espera

pues nadie baila sin canto.

Sigue llamando entretanto

cajón a la voz primera.

 

 

El canto inicia el paseo

con un saludo en el cruce,

media vuelta los conduce

a otro cruce y al careo.

Tras lateral contoneo

vuelta y trocar posición…

Como dicha operación

se da al fin de cada estrofa,

en vez de bailar por mofa

escuchen con atención.

 

 

Como quien sudor enjuga

un momento se reposa,

prosigue la Resbalosa

y viene después la Fuga:

El bailarín se apechuga,

ella sube la pollera.

Como peruana bandera

blanco y rojo, dos pañuelos

dicen en airosos vuelos

¡aquí está la Marinera…!

 

Victoria Santa Cruz (Victoria Santa Cruz Gamarra) Componente de una de las principales familias negras del Perú, musicalmente salvó delolvido muchos de nuestros ritmos costeños de raíz africana. Investigadora y recreadora se encargó de preservar letras y ritmos que cultivaba su familia.Así produjo, pregones, landós, zamacuecas y cuartetas de marineras limeñas. Con su hermano Nicomedes, compuso el inolvidable «Callejón de un solocaño», y con César «Del callejón a la quinta».

 

 

NICOMEDES, decimista, folklorista, escritor, quien al igual que su hermana Victoria, fuera uno de los propagadores de la música afro-peruana; de versos sensitivos, voluptuosos, bravíos.

 

Desde muy niño mostró sus cualidades, componiendo versos para su señora madre. Luego aprendió el oficio de cerrajero, que paulatínamente fue cediendo paso al de decimista consagrado.

 

«Johannesburgo», «Congo Belga» y «La Noche», son algunos de los discos de música y poesía con los que inició su producción artística. Más tarde vendría su LP «Canto Negro», «Ritmos Negros con toque de Percusión», como él lo definía.

 

En su trayectoria, acumuló una serie de premios, como aquella medalla de oro que recibiera de manos de la Reina de la Tradición, señorita Elvira de la Puente y Ganoza, en el IV Festival Folklórico de Música Peruana, realizado en el teatro Segura, en la década del 60.

 

Con el Conjunto «Cumanana», que fundara con su hermana Victoria, tuvo oportunidad de presentar una serie de recitales, como los recordados «Miércoles de Poesía», en el teatro La Cabaña, que dirigía el actor Hudson Valdivia.

 

«Malató», fue una de las obras mejor logradas conjuntamente con su hermana Victoria, que fue llevada al teatro y César Miró diría al respecto: ««Malató», si no es el primero, es el ensayo más ambicioso de teatro negro que se intenta entre nosotros …Victoria y Nicomedes, lo han realizado. «Malató», tiene la calidad de lo que proviene de una sensibilidad fina y de una auténtica devoción por los valores propios».

 

Nicomedes, tuvo la oportunidad de presentar programas de televisión, basados en las tradiciones de nuestra Lima señorial y su folklore negro costumbrista.

 

Sus últimos años los pasó en España, donde presentara «La Raíz del Canto», recorriendo varias provincias. En 1982, hizo un homenaje especial a la Selección Peruana de Fútbol, cuando arribara para el Mundial «España 82».

 

Nicomedes nos dejó un 5 de febrero de 1992, a la edad de 67 años; llevándose su decimista arte hacia la eternidad.

PEDRO PACHECO

Por :Jose Antonio «El Chalan»

Chalaco, de la quinta cuadra del jiron Apurimac, barrio de atletas y cantantes, el chino Pacheco nacio a la composición años «ha». ¿Cuantós? no los confiesa, o si, pero no a la afición.

Rebelde y palomilloso ya casi a la edad de 7 años se gana la expulsión del Colegio Nacional de Bellavista por patear canillas adultas y ajenas. Dice que al igual que esa composicion «todo empezo como jugando» empezo a hacer poemas a las enamoradas de sus amigos y se fue convirtiendo en uno de los prolificos compositores de musica criolla e internacional de nuestro medio. Por si Uds., no lo saben, es nada menos que el autor de «Siempre te amare», «Asi lo quieres Tu» y «Mi ultima cancion que tanto cantara «Lucha Reyes».

Ultimamente fue Lucia de la Cruz la intreprete mas frecuente de sus temas. De todas estas cosas, de su forma de trabajar, de las peñas, de sus anecdotas, de sus canciones, nos habla en esta nota con tono pausado y voz baja.

Dice no recordar cuando compuso su primera cancion y nunca imagino que esto le daria beneficios monetarios, no pertenecia a ninguna entidad autorial. Un dia estaba en la Peña Zamudio y el dueño, Julio Zamudio se iba a una asamblea de SAYCOPE (Sociedad de Autores y Compositores del Perú).

Ya se despedia cuando me dijo «Vamos acompañame» a ti te conviene, tu eres medio compositor». Ya yo tenia canciones para mi y las cantaba en las jaranas. Fuimos con el y, efectivamente, estuvimos en la asamblea y, sin querer me pidieron mi opinion, me presentaron como compositor y total me sali inscribiendo en SAYCOPE y a los dos meses nomas ya era dirigente. Alli por primera vez vine a saber que con las canciones se podia ganar dinero.

La primera cancion que fue grabada la hizo Edith Barr. Fue la canción «Me preguntas que te doy» que obtuvo el segundo lugar en el Festival de Ancón.

Conoci a Lucha Reyes en las peñas por primera vez. No puedo precisar muy bien en donde pero creo que fue en «El sentir de los barrios». Ella nacio alli, alli se hizo, nos conocimos y seguimos cultivando la amistad, nos veiamos cada cierto tiempo en las peñas en distintos sitios, hasta que ya comenzo a pedirme canciones y cuando comenzo a grabar, me exigia.

Lucha sintio una predileccion por mis temas yo no se por que. Es una cosa rara, es mas, esto lo vine a comprobar cuando ella me exigio, por que me exigio, hay testigos de ello, «Mi ultima cancion». Yo no le queria hacer ese tema y no se lo iba a hacer, ya me habia cantado otros temas pero yo no era conocido. Cuando ella comenzo a pedirme ese tema al mismo tiempo pedia a los compositores de su espacio radial de Radio Union, que le hicieran temas alusivos a su despedida. Ella ya sabia que se iba a morir, sabia que estaba desahuciada. Le habian dado dos años de vida y estaba sobre los dos y medio. Tan es asi, que me decia: «Mira hermanito, no te preocupes, yo quiero un tema asi, de despedida, porque tu sabes que yo me voy a morir en cualquier momento. No hay ningun problema, yo se que me voy a morir.

Para mi, Lucha Reyes era una mujer especial. Eso es muy importante. Todo lo adivino, dos dias antes de su muerte, el 29 de octubre de 1973, ella lo predijo al contestarle una pregunta a «Pomada» Lazon, un integrante de su conjunto. Parece que Lucha le debia un bolo (pago por una funcion artistica). Bajamos de tener una audicion y «Pomada» le dijo: «Lucha, me has traido «mi cuestion»» y Lucha le contesto: ¡Uyyy hermanito! me he olvidado, he dejado toda mi plata en la casa» Y «Pomada» le dijo: «Ya me fregaste» Y ella le contesto:»¿Que cosa crees que me voy a quedar con tu plata o que me voy a morir? Ya te he dicho que Yo me muero el 31 de octubre en un escenario. Yo no me voy a morir cualquier dia». Y estabamos a 29 de Octubre.

A las 48 horas murio.

Ella siempre decia, yo me muero cantando en un escenario o me muero el Dia de la Cancion Criolla y se murio el dia de la Cancion Criolla, curioso verdad?

No se, para mi fue una mujer de presagios, media pitonisa. Ahora ella, ¿Por que es que me eligio a mi? Polo Campos, me acuerdo le llevo la letra y la recito en el programa. Lucha parada frente al microfono me miro y me hizo asi (señal de «no» con el indice), «Tu me la haces» me dijo. MI esposa es testigo. Yo estaba de novio con ella todavia e ibamos a ver a Lucha. Nos invitaba almuerzitos a veces. «Yo me voy a morir, yo se. Cual es el problema. ¡»Que chicha»! decia ella. Eso es lo que Yo hasta ahora no comprendo.

Cuando con Juan Mosto llegamos a su casa de Lucha a llevarle por primera vez la letra para que la aprendiera, le dije a Juan que el la entregara. Y el me

decia: No, no, no, entregala Tu. Algo asi como que teniamos miedo. Yo le tenia un respeto a esa letra. Era una cosa muy fea para mi, era algo chocante. Entramos, Lucha se acerco porque ya estaba un poco ciega, se puso los lentes, la leyo y dijo «¡Esto es lo que Yo necesito!». No me muevan nada, no cambies nada, no hagas nada». Y ahi quedo.

Despues de la muerte de Lucha escuche muchas veces decir que ya nadie queria interpretar «Mi ultima cancion», bueno, al menos Yo la canto. Todo el año la canto en el show que hago. En los sitios donde Yo voy a trabajar practicamente me obligan a hacer el Homenaje a Lucha Reyes. Entonces canto «Mi ultima cancion», hago una plegaria, otra canción que se llama «Una oración para Lucha Reyes» y voy a grabar en estos dias todo el homenaje completo. Hay quienes cantan «Mi ultima cancion», pero si, son muy pocas. Una de ellas es Vicky Mendoza, la emula de Lucha.

Considero que hay muchas buenas interpretes de valses aunque casi nunca lo digo, pero por ejemplo esta la eterna Jesus Vasquez, Lucia de la Cruz, Eva Ayllon, Edith Barr, son muy buenas de primera linea, muy buenas interpretes. Tambien en el ritmo jaranero hay una campeona: Esther Granados. Quien la gana a esa. Solita me jaraneo, echa, dale. Cada una en su estilo.

Y en varones ¡Matallana, pues!, el Zambo Cavero, pero cada uno en su estilo. El estilo de Cavero es unico ¿no?. El es el campeon. Matallana es el campeon en marinera y en todas esas cosas, Romulo Varillas es el lagrimero, el cantante lloron, el sentimental, otro estilo. Y asi hay otros cantantes que no recuerdo.

Luis Abelardo Núñez

(Luis Abelardo Takahashi Núñez)

Norteño de ascendencia japonesa, es una clara demostración de la producción musical mestiza. Valses como «Embrujo», con matices andinos, marineras como «Saca chispas» y «Que viva Chiclayo» y temas como «Con locura», «Imaginación» y «Ansias» con armonías orientales e indudable sentido románticamente criollo ratifican lo dicho. Actualmente radica en japón.
ABELARDO NUNEZ, su verdadero nombre es Abelardo Takahashi Nunez, gran compositor ferreñafano, tiene numerosas canciones las cuales circulan a nivel nacional e internacional. Su especialidad son los valses y marineras, los mismos que figuran en diversas grabaciones.
Destaca entre todas el vals Engañada.
Enorme es el aporte de personajes de esta cepa a la música popular del Perú. Luis Abelardo Takahashi Núñez señorea. Alguna vez, cuenta Watanabe, preguntó a Chabuca Granda quién era el mejor compositor de valses de este tiempo. Respuesta rápida: Luis Abelardo Takahashi Núñez.

ENTREVISTA:

(Mario Castro, corresponsal/Tokio, Japón).- Después de combatir un cáncer
a la piel con un tratamiento ambulante de quimioterapia al que se sometió
durante cuatro meses, el compositor criollo Luis Abelardo Takahashi Nuñez
dice sentirse: «Como nuevo, y listo para el segundo round, oiga usted.
Porque como se dice en nuestra marinera, «No hay primera sin segunda, ¿No
le parece?».

Vital a pesar de la enfermedad y de sus 75 años, el creador de la marinera
«Sacachispas» dijo a El Comercio que los doctores le han dado tres meses
de descanso, antes de reiniciar nuevamente las sesiones de quimioterapia.

El tratamiento, busca eliminar del todo un melanoma en segundo grado,
cáncer que se manifestó a través de varios tumores de diversos tamaños que
le fueron extirpados del rostro, el cráneo y alrededor de ambas orejas, en
dos operaciones quirúrgicas.

«Terminé el tratamiento en agosto y debo reiniciarlos a fines de
noviembre», explico el fundador de la Peña Tricolor, entidad cultural que
ha puesto a funcionar en estas islas.

Residente en Japón desde 1996, tiene confianza en superar la enfermedad.
«El hombre tiene que tener fe, sino, está perdido. Y yo tengo fe. Además,
si durante toda mi vida no puedo decir que me he portado bien, tampoco me
he portado mal», asegura.

Lejos de estar inactivo, Takahashi Nuñez asegura haber aprovechado estos
cuatro meses «de descanso obligatorio», para terminar el último libro que
está escribiendo.

«Está en etapa de corrección, casi listo para mandarlo al Perú a que lo
impriman. Se llama «Los huacos silvadores de Tungula» que solo existen en
Batan Grande, una localidad cercana a Ferreñafe, mi tierra. Veremos pues,
si puedo celebrar la publicación del libro el próximo 22 de noviembre,
cuando debo apagar 76 velitas». 

YMA SUMAC

La voz de los incas: Yma Sumac

Todavía es una milagrosa criatura musical con una voz más poderosa que la de cualquier cantante de ópera, carismática, misteriosa y de una magnífica belleza.
Hablamos de Zoila Augusta Emperatriz Chavarri del Castillo, conocida también bajo su nombre artístico Yma Sumac.

Su nombre real es Zoila Emperatriz Chavarri del Castillo. Nació el 12 de Septiembre de 1.924 en las montañas de Ichocán (16 mil metros sobre el nivel del mar),en Cajamarca, Perú. Su madre fue Emilia(descendiente de Atahualpa,el último rey Inca) y su padre Sixto (un terrateniente de origen español). Sus amigos le apodaban Perita. Desde los 12 años embelezaba a su gente con una voz encantadora imitando los sonidos de la naturaleza, dejando colar su regia estirpe de sonidos altibajos. Una semidiosa comenzaba a gestarse. Posteriormente, sus habilidades la llevaron a ser solicitada por una delegación oficial de Lima y allí es invitada a la Radio Nacional del Perú,conducida por el compositor Moisés Vivanco, quién a la postre sería su esposo y tutor por mas de 10 años. Se separó de Vivanco en 1.965, quién murió el 19 de Septiembre de 1.998. Al pié del volcán Misti en Perú,nació su hijo Charles el 06 de Julio de 1.942. Fundó junto con su esposo y Cholita Rivero el trío Inca Taki. Sus primeros éxitos musicales vinieron con el LP Voz de Xtabay, del cual sin publicidad alguna se vendieron mas de medio millón de copias en 1.950. En 1.951 salió al aire su nueva producción: La Leyenda de la Virgen del Sol, dónde resalta mucho la música ancestral y folclórica del Perú, esto le valió la invitación del presidente de la Unión Soviética, Nikita Krushchev a visitar 40 ciudades de ésta,de dónde surgió un trabajo musical en vivo: Tour Ruso, en 1.961. También actuó en New York, Manhatan y Londres. Éstas aclamaciones le ocasionaron desaires en Perú, a tal punto que le negaron una presentación en el Teatro Municipal de Lima porque exhibían unos perros acróbatas de un circo ruso. Según expertos de la música, incluyendo seguidores de la vida de ella, es una de las voces mas impresionantes que hubo en el siglo XX. Su registro vocal recorre 5 octavas de rango teniendo la versatilidad de interpretar desde un Barítono pasando por un Contralto hasta llegar al Soprano con los altos mas agudos. En una ópera podría cantar en todos los papeles clásicos femeninos y masculinos. Sobre su vida se tejen varios misterios, como su exacta fecha de nacimiento, el hecho que vivió de incógnito en cierta época como una doméstica de nombre Amy Camus (su nombre artístico al revés),también se dicen relatos velados, mitos y leyendas .

Hoy es descubierta por todos, escuchada por los mas afortunados y cantada por nadie. Ésta legendaria princesa Quechúa vivía en Los Ángeles para el 2.000 a la edad de 76 años. (A.J.B.L.)
Su historia está hecha de la misma materia que las leyendas, con sus cuerdas vocales logra encender verdaderas obras pirotécnicas y su árbol genealógico se remonta hasta el último emperador inca Atahualpa que fue asesinado por el español Pizarro en 1533 durante la conquista del Perú.

 

Este ilustre orígen le fue confirmada en 1946 por el Consul General Peruano en los EEUU por escrito. Con ello se le puso fin a los rumores que la acusaban de ser una simple ama de casa de Brooklyn cuyo verdadero nombre era Amy Camus.

En realidad, Yma Sumac procede de Ichocán, un pueblo en el distrito de Cajamarca en la meseta del Perú. Su espléndida carrera la llevaría hasta Hollywood, donde logró fama mundial pasajera con su extraordinaria voz de cuatro y media octavas y una puñada de discos.

Su aventurera historia comienza, según „La crónica“, un periodico peruano, en 1939 en su pueblo natal. Con apenas 12 años de edad, Yma canta allí en ocasiones especiales canciones escogidas en quechua. En una fiesta tradicional en honor al Dios del Sol, Inti Wantanam fue descubierta por un empleado de gobierno que la lleva junto con su familia a Lima. A los 14 años se casa con él que posteriormente sería su manager y asesor de musica, Moisés Vivanco. En los años siguientes viajaría con él y su Compañía Peruana de Arte por toda Latinoamérica, grabando discos, participando en películas y programas de radio. Se la celebra tormentosamente como estrella del folklore.

En los años 40 se muda hacia Nueva York, dónde el éxito se hace esperar: su repertorio es demasiado insólito, los producentes de aquellos tiempos se sienten extrañados. A quién se le ocurre cantar simples canciones folklóricas cuando tiene la capacidad de usar las árias más difíciles como simples ejercícios gimnásticos para las cuerdas vocales?

Yma Sumac tiene que decidirse entre la música clásica y sus raíces latinoamericanos. Realmente no tiene opción: su estilo excéntrico la tilda como una testaruda y curiosa dama. Durante años viaja a lo largo y ancho del país, se conforma con pequeños contratos y su familia vive principalmente de la venta de atún.

Recién su descubrimiento por Capitol Records que la invita a Hollywood trae finalmente el deseado éxito. Su primer disco, Voice of the Xtabay (1950), impacta como una bomba y se convierte en poquísimo tiempo en un bestseller. Su enorme variedad de tonos – puede cantar todo de bajo hasta soprano coloratura -, sus increíbles cambios de cantos líricos de coloratura a retumbos, rugidos y gruñidos fascinan al mundo de la música y a su público.
La autopresentación de Yma como alta sacerdotiza de los incas y Virgen del Sol dan en el punto del tiempo. Un halo místico, exótico e intransparente envuelve su persona.

Que tuviera éxito en este tiempo es explicable por el hecho de recién haber pasado el susto de la Segunda Guerra Mundial, y que la gente huía hacia en entretenimiento ligero. En el continente del Norte de América existía un deslumbramiento por los países „exóticos“ del Sur. Seguramente, los explícitos reportajes del descubrimiento del legendario Macchú Pichú (1911) en los años treinta contribuían a la fascinación. La figura de la „princesa incaíca cantando“armonizaba con la nostaljia por lo misterioso de la gente.

Para la artista peruana se suceden precipitadamente un musical en el Broadway, una película en Hollywood con Charlton Heston en la cual ella se autointerpreta – una princesa inca – (The secret of the Inca, 1952/53), y cuatro discos de larga duración. Su perfecta música de entretenimiento se puede disfrutar de manera más magnífica en su album más vendido y conocido „Mambo!“ de 1955, un homenaje a las entonces (y ahora) bailes de moda de Latinoamérica.

Los exorbitantes y espectaculares shows le ofrecían a la diva el marco adecuado para sus acrobáticos cantos.

Sin esfuerzo alguno canturreaba dulces cancioncitas, bramaba en profundos bajos con ahumada voz de cantante de whisky o evocaba con siseos y chasquidos místicos sonidos de la jungla amazónica.

 

Claro, las imagenes de los discos parecen de opereta con la mímica dramática de la artista, con los disfrazes costosos y las joyas lujosas. Contrariamente a sus anteriores giras en América latina, cuando cantaba la auténtica música folklórica de los Andes, en sus discos exitosos tenía que hacer concesiones al gusto blanco, al gusto del público en EEUU. Sí, querían cosas exóticas y distintas, pero en la mayoría de los casos no llegaron más allá de un Tarzán manso de tipo Johnny Weissmüller.

Así que también las composiciones de Yma, o sea de su marido, no contenían más que una inspiración folklórica, sin el apoyo bombástico de una banda de instrumentos de viento y los graciosos efectos vocales y expresivos de la cantante, sus discos nunca hubieran alanzado grandes ventas. La técnica de la grabación de discos en estos años tenía que mostrar toda su capacidad cuando la reina de la improvisación volaba con sus voz otra vez hasta „alturas de estratosfera“ a toda velocidad – y la capacidad no alcanzó en todos los casos, la artista acostumbraba no avisar antes!

Además se permitío uno u otro escándalo y un divorcio espectacular, y en consecuencia su vida privada se extendía en detalles por la prensa amarilla. A eso se tiene que añadir otra cosa más grave: su marido, Moisés Vivanco, había defraudado hacía años los impuestos, hecho que se le tomaba muy mal en los EEUU ultraconservativos de los 50. La fama de Yma Sumac sufrió bastante y la presión de repagar las deúdas enormes le dio un cambio clave a su vida. Por lo tanto,Vivanco organizó una gira mundial pasando por Rusia, Europa y Asia. Aunque todos los conciertos fueron bastante exitosos y cinco años más tardes podrían pagar los impuestos defraudadas, al regresar a EEUU ya nadie conocía más el nombre de Yma Sumac. Cinco años sin discos nuevos, sin apariencias públicas, en cuanto a música „exótica“ popular, era demasiado tiempo. Encima, el gusto musical había cambiado enormemente: masas de petticoats de color rosado marcaban las calles y el estilo de Yma, visto desde la perspectiva de un público adicto a la música rock`n roll, parecía un poco muy raro.

En 1965, los dos se divorciaron definitivamente, Vivanco emigró a España, mientras Yma, casi olvidada, se quedó en California.

 
Como los productores se acordaban muy detalladamente de esa excepcional dama y de unas particularidades folklorísticas como „Legends of the Jivaro“, los discos nuevos se realizaron sólo con dificuldades.

En los años 70 durante una primera ola de revitalización de esta música, su estrella subió otra vez. Con sólo un concierto, Yma logró convertir a una nueva generación de aficionados en una masa de adictos fanáticos. La mayoría de ellos ni siquiera nació en los tiempos de los primeros éxitos de la diva.

Los cambios permanentes de su popularidad entretanto se habían convertido en una característica de la mujer que hoy tiene más de 70 años de edad. Nunca más ganó tanta fama como en sus años emprendedores aunque su voz todavía es una delícia para el oído.

Corre la voz de que hoy todavía existe una princesa incaíca que vive en California dando de vez en cuando conciertos con una voz mágica.

En 1996, sus discos viejos y unas compilaciones fueron reeditadas en compact.
Para el disfrute de todos ustedes es posible escuchar unas canciones seleccionadas en la versión americana de amazon. No se lo pierden.

Lorenzo Humberto Sotomayor L.

Lorenzo Humberto Sotomayor
Lorenzo Humberto Sotomayor

Lorenzo Humberto Sotomayor Lishner, nació el 10 de Agosto de 1915, siendo hijo de don José Francisco Sotomayor y Rodulfo y de doña Leonor Lishner Pimentel de Sotomayor.

Lorenzo cursó sus estudios en el Colegio Saint Joseph de los Hermanos Maristas en el Callao (actualmente Colegio San José) hasta 4º de Media, pues el último año lo hizo en el Colegio Guadalupe de Lima en el año 1933. Luego ingresó a la Universidad Católica para seguir Derecho, pero encontrándose aún en la Facultad de Letras abandonó los estudios por la música.

Se casó el 31 de Mayo de 1941 con Elvira von Maack Lara, habiendo tenido dos hijos: Lorenzo y Elvira Sotomayor von Maack. Ha quedado viudo el 27 de Octubre de 1999″.

Su primera composición criolla fue el Vals «El Solitario» en 1939. «Corazón» lo compuso en 1945.

Chabuca Granda

Chabuca Granda
Chabuca Granda

Su nombre completo fue María Isabel Granda Larco. Nació en el departamento de Apurímac, Perú, el 3 de septiembre de 1920; murió en 1983 en Miami, Estados Unidos. Recién casados, sus padres -el ingeniero Eduardo Granda y San Bartolomé y doña Isabel Susana Larco Ferrari- se instalaron cerca de la mina de oro y plata donde trabajaba el padre; su primer hijo murió muy pequeño. El nacimiento de Chabuca los consoló un poco de la pérdida. A las pocas horas de nacer la niña, la casa entera se incendió y quedó en cenizas; Chabuca fue salvada por un trabajador.

La familia se muda a Lima cuando la niña ya está en edad de asistir a la escuela. Fue buena deportista; estudió en el Colegio de Jesús y a los 12 años descubrió que tenía grandes aptitudes para la música. Llegó a ser presidenta de la Asociación de Canto del Colegio. Tanto el padre como el abuelo de Chabuca habían sido integrantes de conocidos grupos filarmónicos, por lo que su vocación musical fue considerada hereditaria.

Chabuca formó un dúo con su amiga Pilar Mujica, llamado «Luz y sombra», y cantaron en la Radio Nacional. En 1938 se desempeña como animadora de un programa de radio para artistas aficionados usando el pseudónimo de Conchito cuello largo. En 1940 forma un trío con Martha y Charo Gibson y empiezan a interpretar canciones mexicanas; recordemos que Chabuca tuvo gran influencia de los compositores mexicanos. Fue una de las primeras artistas que apareció en la Televisión de Perú, en 1958.

Se casa con Enrique Demetrio Fuller da Costa el 13 de mayo de 1942; tuvo dos hijos, Carlos Enrique (1947) y Teresa María Isabel Emilia (1948). Su matrimonio fracasa en 1952 y su esposo la acusa de «conducta deshonesta» por querer componer valses de música criolla.

Su despliegue personal como cantautora se inicia luego de su divoricio, que fue visto como un escándalo para la sociedad limeña de aquella época.

El primer período de su producción creativa es netamente evocativo y pintoresco; “Chabuca” –este es el nombre con el que se hizo llamar– le canta a la Lima antigua señorial de fines del 1800. Es la ciudad que ella conoció a través de su padre, la del barrio del Barranco, de grandes casonas francesas, con inmensos portales y jardines de invierno. A esta etapa pertenecen “Lima de Veras”, “La flor de la Canela”, “Fina Estampa”, “Gracia”, “José Antonio”, “Zeñó Manué” y muchas otras. Ella rompe la estructura rítmica convencional del vals, y sus melodías, de tesitura muy amplia, alternarán el nuevo lenguaje que propuso con el de los antiguos valses de salón. Su producción también revela una estrecha relación entre letra y melodía, que fue variando con el tiempo hacia una tendencia poética cada vez más sintética.

Mujer de buen comer y vivir, a partir de esta época empieza a componer las canciones que la harían famosa en todo el mundo. Hizo gran amistad con María Dolores Pradera, quien inmortalizó algunas de sus composiciones. A esta etapa pertenecen “Lima de Veras”, “La flor de la Canela”, “Fina Estampa”, “Gracia”, “José Antonio”, “Zeñó Manué” y muchas otras. Ella rompe la estructura rítmica convencional del vals, y sus melodías, de tesitura muy amplia, alternarán el nuevo lenguaje que propuso con el de los antiguos valses de salón. Su producción también revela una estrecha relación entre letra y melodía, que fue variando con el tiempo hacia una tendencia poética cada vez más sintética.

Más adelante, Chabuca quebrantará incluso las estructuras de la poesía convencional, y el ritmo de las canciones seguirá los pasos de esa evasión de las rimas, consonancias y métricas dadas. A este última etapa pertenece un ciclo de canciones dedicadas a la chilena Violeta Parra y a Javier Heraud, poeta peruano muerto en la revolución de Velasco Alvarado.

En sus últimos años, Chabuca Granda interpretó un repertorio ligado al renacimiento de la música negra afro-peruana que, a pesar de haber estado presente a nivel popular, había sido denostado por razones sociales y raciales. Manejó con maestría “negra” el abanico de ritmos que enriquecieron la música popular peruana y su poesía tomó el sesgo de la acuarela, el trazo sintético y sugerente de colores y sensaciones.

Murió por una disfunción cardíaca en una clínica de los Estados Unidos, en el año 1983. Su voz y su vasta creación se extendieron más allá de las fronteras de su país, recreadas también por intérpretes de todo el mundo que han visto en sus obras una fina y sensible expresión de la música del Perú.

Luis Abanto Morales

Luis Abanto Morales
Luis Abanto Morales

 

Luciano Huambachano Temoche, compositor nacido el 29 de mayo de 1910 en Lima y, por lo tanto, de una generación posterior a la de Pinglo, es autor de un bello vals, «Barrio bajopontino»,entre otros muchos.

Debió representar mucho para los criollos María Eugenia Gallo. Donosa alegre, acaso un monumento al amor. César Enrique Ferreyros la cita tambien en su semblanza «Abajo el Puente», inserta en el opúsculo Barrios de mi cuidad que publicó en 1946.

Huambachano vivía en Malambo, rodeado de un vecindario mayoritariamente negro, mulato y zambo; pero él, tan jaranista como sus fraternales amigos, se sentía orgulloso de su raigambre chola, o , si queremos expresarlo de otra manera, de su linaje cupisnique. En la década de 1940 se mudó al Pasaje tercero Nº254 del cuarto Barrio Obrero, en el Puente del Ejército (Rímac).

Decía Augusto Ascuez (1892-1985) que en el grupo denominado «Los 12 pares de Francia» eran figuras destacadas tanto Luciano Huambachano como su hermano Enrique «que tocaba bandurria, piano y guitarra»; Malambo, actual avenida Francisco Pizarro, «era como una sola familia que se frecuentaba mucho para los santos y las jaranas» (Ascuez).

El futuro compositor criollo había sido educado en el Colegio de Adán Filomeno, un popularísimo maestro de escuela a quien don Mateo Huambachano y doña Hermelinda Temoche recomendaron al muchacho para que lo instruyese lo mejor posible y, si el caso requería, «lo metiese en vereda». Porque era un poco inquieto, travieso, amigo de la calle y de la bullanga. Pasó el tiempo y Luciano, un joven de 22 años en 1932, formó el dúo Huambachano-Pizarro.

Eran reconocidos como «Los gauchos peruanos»

por su compenetración con la música argentina. En «La lira limeña» Nº99 figura el tango «Bailarín», con letra de César Pizarro y música de Luciano Huambachano. Tocaba guitarra y piano.

Después de este periodo tanguero.del que ningún cantante o compositor criollo escapó, se definió su vocación artística.

 

LUCIANO HUAMBACHANO

Todos los años, en julio, los limeños criollos dan serenata a la Virgen del Carmen en su antiguo santuario de los Barrios Altos. Desde hace muchos años estaba a cargo de la organización de ese homenaje a la patrona de la canción criolla, uno de los devotos mas ciertos y fervorosos de la reina del Carmelo; Luciano Huambachano Temoche. Pero él que espera llegar a tan venturoso acontecimiento, murió un martes cinco de ese mes. Antes de condolerse por la desaparición de tan auténtica figura de la canción criolla, trovador, intérprete instrumental y compositor de fecunda trayectoria, rendimos homenaje a su señorío singular, a su elegancia y profunda manera de entender la amistad. Ha partido un virtuoso caballero, paladín de la fraternidad, que tanto se hizo querer y respetar por quienes tuvimos el privilegio de ser sus amigos.

 

SU CAMINO AL ARTE

Ya en 1924 el famoso dúo Huambachano-Pizarro, compuesto por Luciano Huambachano y César Pizarro, debutó en el desaparecido teatro «Royal» del jirón Cajamarca. Allí prácticamente se inicia la carrera artística del joven trovador que era eximio guitarrista. Ellos estuvieron en la inauguración de Radio Nacional , cuyo primer director fue don Antonio Garland, la primera locutora nuestra admirada doña Rosa Hernando y el pianista, nada menos que Carlos A. Saco. Desde aquellos años aurorales ¿cuántos conjuntos integró Luciano? Solo él podría habernos dado la respuesta.

Pero el impulso musical venía en la sangre porque habiendo nacido en 1910 en el corazón de Malambo, fueron sus progenitores don Mateo Huambachano, maestro y educador y su madre doña Hermelinda Temoche y Granados, ambos músicos de gran inspiración.

Por eso quien conoció a los Sancho Dávila y los Ascues y a lo más graneado de la canción rimense, sabía lo que decía, y quien instrumentaba piano y guitarra tan bien como Huambachano, era reconocido como maestro y autoridad en un ramo que se le desfigura por los consabidos idiotas, si se afirma fue de legitima y la mejor bohemia.

Como compositor deja canciones muy bellas y con un texto auténticamente limeño, citadino, flor de barrio, lo más conocido su valse: «Barrio bajopontino», que fue si se quiere una obra autobiográfica; «Chinita», «La Perricholi» y el último, tal vez «Malambo».

El legendario valse de César Miró y Filomeno Ormeño: «Se va la paloma», que desde hace tantos años invita a ir a las fiestas de la Virgen del Carmen, lo he sentido siempre muy ligado a mis afectos. El valse dice:-Vamos a la fiesta del Carmen. Y él que en la práctica todos los años convocaba a esa serenata clásica, don Luciano Huambachano, será siempre el más querido ausente. Más sabe la gente y lo enseña la liturgia que es la Señora Carmelitana la conductora de las buenas almas. Y ya en la compañía de su augusta y dulce patrona, señora de la música criolla, ha entrado al reino de Dios.

Erasmo Díaz: El compositor del amor

Erasmo Díaz Yuiján
Erasmo Díaz Yuiján

Después del homenaje que el compositor Erasmo Díaz recibiera con el álbum Sólo Erasmo, prepara jóvenes valores del criollismo con algunos de sus nuevos temas

El sendero sinuoso del amor alimenta sus composiciones. Hace más de medio siglo, Erasmo Díaz Yuiján (Chincha, 1925) descubrió en la música el mejor lenguaje para comunicar sus sentimientos. Todo se lo debe al piano Wetzell que heredó de sus abuelos y al incansable apoyo de “mamá Angélica”.

A los diez años viajó a Lima e ingresó en el colegio Salesiano de Breña. Allí conoció a Mario Cavagnaro –“compañero de carpeta y travesuras”- y juntos reafirmaron su vocación artística al compartir la música sacra con la ejecución de todo tipo de géneros.

En 1949, mientras dirigía el conjunto criollo de Radio América y estudiaba derecho en la Casona de San Marcos, Erasmo conoció al amor de su vida: Anita Tang. La cortejó día y noche, sin mayor resultado. Hasta que, inspirado, le compuso su primer –y más famoso- valse: Cariñito.

La dulzura de la canción (hoy llegas a mi lado / como una bendición / jamás quiero que te apartes / tú de mi corazón) conmovió y sedujo a la muchacha, hasta el punto de que, luego ella aceptara casarse con él.  Ahora, cincuenta años después, no sólo continúan casados, sino, además, disfrutan de los placeres que les otorgan cinco hijas y dos nietos.

“En estos días no existe el romanticismo de antaño. Los jóvenes van a otro ritmo, cambian de pareja demasiado pronto. Desconocen que, con el tiempo, el amor verdadero se transforma, que significa un aprendizaje continuo. Por eso, el amor fue y será la principal motivación de mi obra”, afirma.

Su creatividad se traduce en valses –Sincera confesión, Valsecito del ayer, Amé y perdí-, en boleros –Te esperaré- e incluso en un festejo como La parrita. Además de Olvídame, el tema que lanzó al estrellato a Eva Ayllón durante el Festival Criollo de Sullana de 1978.

El autor criollo reconoce que, al componer, son igual de fructíferos el enamoramiento y las desilusiones amorosas. “El amor frustrado, el engaño y el despecho producen una sensación única, que a la juventud contemporánea le fascina. Por eso, mis composiciones actuales se relacionan con esos temas”.

Así, cada sábado se reúne en su casa con jóvenes valores del criollismo –Pamela Abanto, Carlos Castillo y Roxana Molina-, quienes interpretan sus temas inéditos. De ese modo dan vida a un nuevo registro del compositor en piezas que reflejan las pérdidas amorosas (Amigo de qué) y el desamor (Con qué derecho).

A ello se suma el homenaje musical que recibe con el disco Sólo Erasmo de Vilma Chávez y producido por Lucho González, que reúne a diez de sus clásicos y dos temas nuevos que corroboran su vigencia: En Lima fue y Mirador del puente.

Risueño, y con saludable sinceridad, confiesa que su amor por la música es inmenso. Por eso, no se opone a que se renueve y evolucione. Aunque a sus 77 años es un hombre realizado, considera que su mayor sueño continúa siendo la globalización de nuestros ritmos.