Mendicidad

Vals

Felipe Pinglo Alva

Cubierto de harapos, la faz macilenta

el pobre mendigo, limosnea un pan

implorando siempre, la bondad ajena

a todos les pide, una caridad

camina encorvado, cual árbol añoso

es prueba viviente de tanta crueldad

con que el mundo, azota a distintos seres

para la innominia de su bacanal.

1.- Quien es no se sabe, su ayer es misterio

de donde ha venido, jamás lo dirá

rayando la aurora, sale diariamente

a implorar que el mundo, le prodigue el pan

«señor, señorita, niño una limosna»

pide con voz llena de angustia mortal

un Dios se lo pague que llega hasta el alma

es el mejor fruto de nuestra bondad.

Tal vez en su infancia, gozo de grandezas

quizá vivió alegre en su pubertad

hoy que ya declina su triste existencia

vive porque vive de la caridad

mendigo sin nombre, su traje lo afrenta

a este mundo vano, artero y falaz

Tu con tus miserias y con tus harapos

vales mas que el oro que el mundo nos da. (Rep 1)